DEL CAOS AL CINE

La planeación en este rodaje fue un reto que nos hizo sacar la casta. Teníamos una locación confirmada para el video de este himno de Penyair, pero el día del rodaje, nos cancelaron la locación a ultimo momento. Breve, tocó activar el modo "Run & Gun" logístico en menos de una hora.

El parche nos llevó a conseguir un taller en Suba, Bogotá. Esta zona no solo sirvió como setting, sino que nos conectó con la esencia pura de Penyair, donde forjó su carrera. El objetivo era contar la historia del trabajo duro y el proceso, y qué mejor que llevar la cámara a la raíz. Sacamos el proyecto adelante con pura energía y cero excusas sin importar los imprevistos

EL PARCHE Y LA CÁMARA

El mood visual es street style con una vibra auténtica, cruda y sin filtro. Se buscó una naturalidad que hiciera sentir al espectador identificado con la historia de esta pieza.

El styling y la dirección de arte se centraron en props funcionales de taller y ambientes oscuros, usando la planimetría para centrar la fuerza en la lírica. El uso del handheld con el 50mm logró ese desenfoque (bokeh) brutal, dando una sensación de cercanía y movimiento constante. Se usaron los tubos de luz como acentos dentro del interior, y luces rebotadas que, combinadas con la oscuridad natural de la bodega, enfatizaron el alto contraste dramático.

LA TÉCNICA QUE NO FALLA

Para capturar la intensidad de Penyair, el cuerpo principal fue la Sony A7IV. Esta cámara nos permitió manejar la poca luz del interior con una sensibilidad top. Usamos un 50mm prime para el level-up cinematográfico en los primeros planos y el 28-70 con enfoque fijo (cero zoom en el set) para las tomas más amplias.

En Post, el color grading se trabajó para ser denso y profundo: negros robustos y saturación baja. Es un look técnico, pero con calle. No hubo necesidad de ND ni difusores, solo luz dura y contrastada manejada a pulso. Así demostramos que, con la artillería adecuada y el flow correcto, se puede lograr una calidad cinematográfica que estalla, sin que el presupuesto se vaya en humo.